
55 años de carisma y misión en Venezuela: Un legado de servicio y esperanza
25 de agosto de 2025
Santidad en Venezuela
17 de octubre de 2025La presencia de María en el pueblo venezolano
La Virgen del Valle
Hablar de Oriente es hablar de una rica tradición cultural, y religiosa, donde nuestra Madre en una pequeña isla quiso establecer su hogar en el año 1530, cuando una embarcación española trajo consigo la Sagrada Imagen de la purísima Virgen a la isla de Cubagua, a petición de los colonos que de España habían llegado a las tierras Neoespartanas. Desde ese momento comienza una historia de fe y tradición que marcará la vida del margariteño, y todo el oriente venezolano.
Con el pasar de los Años, la relación de fe y amor del pueblo oriental hacia la Virgen purísima, se irá acrecentando, de tal manera que, con la llegada de la tempestad a la isla de Cubagua, los pobladores deciden llevarla hasta la Isla de Margarita, donde por designio Divino, decide establecerse en el Valle del Espíritu Santo, donde se le comienza a conocer por el nombre de la Virgen del Valle. A ella se le atribuyen muchos milagros, entre curaciones milagrosas, robos y hallazgos de sus joyas, pero también en tiempos difíciles y de sequías, el pueblo acudía su intercesión pidiendo lluvias para las cosechas. Pero lo mas peculiar es que ella también se le reconoce su intercesión en los hechos históricos del proceso de independencia de Venezuela, por lo que podemos ver que en ella confluye, la fe, la historia y la tradición, lo que conforma la identidad del pueblo oriental.
Vale destacar que es tanta la importancia de la Virgen que ya para el año 1911, es coronada canónicamente, por Monseñor Antonio María Duran obispo de Guayana, por delegación de su santidad Pio X, el 8 de Septiembre de 1911, y en 1921 es nombrada patrona de la de Diócesis de Santo Tomas de Guayana, que para ese entonces incluía los estados del oriente del país (Anzoátegui, Monagas, Sucre, Nueva Esparta, Delta Amacuro) la región Guayana (Bolívar, Amazonas) y las dependencias Federales, siendo reconocida desde entonces como Patrona del oriente Venezolano.
Ahora bien la celebraciones en honor a la Virgen del Valle, están enmarcadas dentro de la misma festividad del nacimiento del virgen, pero también con un profundo resplandor cultural que la enriquecen y hacen de esta fiesta una clara manifestación de fe, en la que se mezcla lo popular con lo litúrgico, desde los pescadores e indígenas guaiqueríes que le rinden homenajes a la Virgen, hasta el creyente que busca consuelo, todos se ven arropados bajo el mismo manto de fe y amor hacia la Virgen bonita, que con amor espera a sus hijos cada 8 de Septiembre.
Virgen de Coromoto
Desde los albores de la historia venezolana, la presencia de María esta inmersa en el corazón del pueblo venezolano, pero por un designio particular, la misma Virgen María, ha querido acompañar con su presencia, dándonos una Mariofanía, es decir su propia manifestación viva, como un recuerdo de su cercanía. La historia de esta bella Señora, como la conocían los indios de la tribu de los cospes se remonta a los año 1651- 1652, cuando nuestra Señora se le aparece al cacique de dicha tribu, en par de ocasiones a el indio Coromoto, la primera en las riberas del rio Tucupido, cercano al pueblo de Guanare, pidiendo que se bautizara para que pueda entrar en el cielo en el año 1651, y la segunda el 8 de septiembre de 1652, donde deja su reliquia en la mano del indio en compañía de su familia, de esta manera se puede observar que es una advocación que está ligada a la evangelización, pero especialmente al sacramento del bautismo y a la familia.
La historia de nuestra tierra también esta ligada a nuestra Señora de Coromoto, pues en el inicio de nuestra evangelización ella fue la primera en llamar a los hombres de nuestra tierra venezolana a la conversión, en ella podemos ver también como la fe del pueblo se enraíza con nuestra identidad nacional, ya que ella ha sido luz en la historia de Venezuela. Con el transcurrir de los Siglos, la imagen de la Bella Señora, como la llamaba el cacique, se iría convirtiendo en parte importante de la fe del pueblo venezolano, ya entrados en el Siglo XX, se establece a la virgen de Coromoto como patrona del pueblo venezolano, por decreto del episcopado Venezolano 1942, en 1944 el Santo Padre Pio XII “la declara patrona celeste, de Toda la República de Venezuela” y el 11 de Septiembre de 1952, se lleva acabo su coronación canónica, que luego, se volvería a repetir en la inauguración del Santuario de la Coromoto, por parte de el Papa Juan Pablo II en 1996, han sido muchos los milagros atribuidos a Nuestra Señora de Coromoto y a su intercesión milagrosa.
Un hecho significativo de esta Mariofanía son los estudios realizados a su reliquia en 2009, durante su proceso de restauración. Se hallaron en ella, características que sugieren un origen no humano, como detalles propios de un ojo humano, junto a inscripciones hebreas e indígenas. Su corona, un penacho indígena, simboliza la realeza, y en la imagen aparecen un indio y el mapa de Venezuela. Además, con el pasar de los años, se ha reportado que la imagen se ha ido restaurando sin intervención humana. El nombre Coromoto también tiene una relación con la Virgen y Venezuela, ya que significa “la que detiene la tormenta” esto revela la misión de María en la historia y el presente de nuestra patria: ella es quien detuvo, detiene y detendrá las tormentas de nuestra tierra venezolana.
José Palacios
Candidato Eudista



